De ensayos y novelas
Durante unos años el blog "Almácigas" fue para mí un buen instrumento para equilibrar la necesidad de escribir, como una opción íntima de recoger negro sobre blanco inquietudes , vivencias, sin más pretensiones y la vanidad agazapada en todo aquel que emborrona cuartillas, cree que tiene algo que decir y desea que al otro lado haya alguien que lo lea.
Los posts eran como botellas lanzadas a la blogosfera, que flotaban ausentes de cartas de navegación y terminaban recalando en las playas de lectores curiosos, en los lugares más insospechados. Cuando ya llevaba más de cincuenta de esas botellas lanzadas a un océano insondable, me entró la curiosidad de saber donde habían recalado.
Los datos me dicen que fueron unos nueve mil lectores, más de la mitad de nuestro país, un porcentaje considerable en los EE.UU., seguidos, curiosamente, de lectores rusos, alemanes, franceses, y una ristra menor de insospechados destinos.
Pero un día, satisfecho el ego quizás, decidí parar y dedicarme más a escribir que a ser leído. Eso me permitió poner orden, método, y de ahí salieron volúmenes que recogían la prosa y el verso, el ensayo y las vidas de ficción imitando a la realidad o viceversa, empezaron a dormir ociosas en la estantería, encuadernadas en edición de pruebas de gusanillo, o seguían dudando si dar el salto desde el disco duro externo.
Hasta que una serie de circunstancias sobrevenidas me ponen en el disparadero de que una de esas historias termina por ser publicada formalmente y en esas estoy, en la miríada de escritores voluntariosos con más o menos que decir, que compiten por los escasos lectores que llegaran, o no, a las obras dependiendo de las plataformas editoriales que las impulsen y el entusiasmo que éstas le pongan a la promoción.
Se rompió el pudor de la creación íntima y ya va a costar recomponerla, me veo, sin querer queriendo, en la disquisición de saber o no saber, si la navegación pautada es capaz de llegar al mismo número de lectores que las botellas lanzadas sin rumbo y si eso tiene a estas alturas de la vida alguna importancia.
Estoy por volver de nuevo a la blogosfera, ahora que los podcast la han convertido en una reliquia, pero dudo que la blogosfera sea capaz siquiera de digerir la acumulación de páginas escritas, ordenadas, por el furor creativo de la reclusión forzosa, o forzada, de los años de pandemia y sus secuelas.
De momento el inventario, denso, espeso, inadecuado para estos tiempos de pocos caracteres diciendo nada, de prisas y dispositivos vistos, que no mirados, a la misma vez, a ver que pasa. Si no pasa nada, nada sucederá en el escaso interés por que suceda.
"Cincuenta y tantas botellas". Tres tomos que ordenan los posts enviados a la blogosfera desde 2014 a 2017.
Otro tomo de ensayos que incorpora la ingeniería de proyectos, gestión por procesos, diseñados y propuestos para iniciativas de emprendimiento social local o de ámbito autonómico.
" Los tiempos de la almáciga ". Una trilogía, que cuenta, a través de un "alter ego", los acontecimientos, las vivencias en los años transcurridos desde 1955 a 2005, y desarrolla la idea de que cada generación se cree protagonista de hechos extraordinarios e irrepetibles. A sabiendas de que cada vida es singular y única, pero que la Historia siempre está en movimiento, a veces en líneas rectas ascendentes o descendentes, otras en espiral, pero el movimiento, el cambio, es lo único permanente.
Así, quienes nacimos entre los años 50 y 60 del siglo pasado, nos hemos visto zarandeados por cambios y transiciones aceleradas, por revoluciones más reales que nominales, que han construido nuestras biografías.
Aunque no creo que todo esté escrito de antemano, sé que hay acontecimientos que escapan a nuestra voluntad y condicionan el destino, de tal manera que hemos de aprender a sobrellevarlo, y armarnos de fuerzas interiores que nos ayuden a mantener el fiel de la balanza entre la realidad que vivimos y como habíamos soñado vivir.
"Domingo de Resurrección". Relato corto sobre las escasa segundas oportunidades que nos puede dar la vida, y el Amor, si construimos las condiciones para que se den.
" Flores en las eras" Antología de poemas con métrica heterodoxa, veintiocho textos ilustrados con acuarelas y alguna técnica mixta.
"Buscando otras lunas ". Un relato de las estaciones del Amor en un itinerario de búsqueda, desde la conmiseración al desarrollo personal en la vocación, el éxito, teniendo a la estética como casi única ética.
"Las agujas que bordan rosas de seda". Tres amigas hacen de la sororidad y la artesanía del bordado, de la confección artesana, los instrumentos de realización, de liberación posible, en un entorno diseñado para mantenerlas en situación de subsidiariedad.
Comentarios
Publicar un comentario